Si en algo son expertos los encargados de recursos humanos de
Google es en identificar el talento a través de un currículum. No en vano
reciben cerca de 50.000 a la semana, una cifra apabullante incluso para un gigante de
Silicon Valley. Eso sí, la mayoría de estos documentos acaban en el montón de «rechazados» y muchas veces por razones que poco tienen que ver con el perfil del candidato.
Lazlo Bock, jefe de contrataciones de la compañía durante los últimos 8 años, ha utilizado su cuenta de
LinkedIn para dar a conocer los errores más comunes con los que se encuentra a diario y propone sencillas soluciones para evitar que la vida laboral de miles de candidatos termine en la papelera.
Lo bueno si breve…
«
Una página de currículum por cada 10 años de experiencia» esa es la regla que debes aplicar cuando te lances sobre el documento en blanco y no sepas si debes quitar o no cierto trabajo o algún curso que realizaste en la universidad. Ser capaz de resumir todo lo que quieres que tu empleador sepa de ti en una página demuestra tu capacidad de sintetizar, comunicar y priorizar, cualidades muy valoradas por los encargados de recursos humanos y que podrían granjearte tu futuro contrato.
Bock recuerda que el propósito de tu currículum vitae (CV)
es conseguir una entrevista de trabajo en la que podrás explayarte tanto como quieras (o te dejen). En ese momento dependerá de ti y no de un papel convencerles de que eres lo que siempre han estado buscando.
No hay puestos para los que buscan ‘travajo’
Las faltas de ortografía son errores que te dejarán en evidencia optes al empleo que optes. Aunque parezca contradictorio, los que más repasan y retocan su currículum suelen ser los más proclives a estos errores. Puede que decidas cambiar una frase y dejes sin darse cuenta parte de su predecesora o que cambies un sujeto y el verbo o parte del predicado ya no concuerden. Los documentos descuadrados o la falta de concordancia entre fechas también hacen saltar las alarmas de los que deciden si pasas o no a la siguiente fase.
Desde Google recomiendan leer tu CV desde el final hasta el principio (ya que nos ayudará a «centrarnos en cada dato, en cada línea» sin verlo como un conjunto y detectaremos más fácilmente posibles equívocos) o pasárselo antes a alguien de confianza para que nos diga si hemos metido la pata.
Ni información confidencial ni mentiras
A los
mentirosos se los descubre enseguida. Si no eres bilingüe olvida el nivel «nativo» cuando rellenes el apartado idiomas y si no sabes manejar ciertos dispositivos o programas informáticos no alardees de ello. Puede que así consigas un currículum llamativo,
pero si no te desenmascaran en la entrevista, lo harán cuando te incorpores a la plantilla y no sepas como manejarte. Incluso al ex - CEO de Yahoo, Scott Thompson, un fallo de este tipo
le costó su puesto.
Por otra parte, si en tu anterior trabajo has firmado una cláusula de confidencialidad deberías seguir respetándola en tu currículum (algo que no ocurre en un 5-10% de documentos que llegan a manos de Google). «Hay que distinguir entre las necesidades de las compañías y tu necesidad de demostrar lo asombroso que eres por haber trabajado para una firma de prestigio», aclara Bock que considera que
ninguna empresa contratará a alguien que puede poner sus ‘secretos’ en conocimiento de la competencia.
Despídete de los diseños estrafalarios
Al igual que cuidamos nuestra apariencia para dar una buena impresión cuando realizamos una entrevista, nuestro currículum tiene la misma misión, por lo que es fundamental que refleje nuestra profesionalidad.
Ciertas modas nos impulsan a dar toques de color o a utilizar diseños vistosos para captar la atención de los de recursos humanos, pero
Bock aboga por la fórmula tradicional.
A pesar de que en algunos casos (como en el de los diseñadores gráficos o los ilustradores) estos modelos son recomendables, Google cree que para el resto de trabajos es más efectivo un CV
legible, negro sobre blanco, bien organizado y con tu información de contacto en cada página (si es que te ha sido imposible reducirlo a una). Además, recomienda adjuntarlo a los emails en formato PDF para evitar incompatibilidades y facilitar su vista previa.
Funciones en la empresa y resultados medibles
Por último, Lazlo Bock añade lo que para él es la mejor manera de presentar tu experiencia laboral: describir exactamente qué funciones has desempeñado, proporcionar datos numéricos sobre tus logros y explicar cómo conseguiste alcanzar esos resultados.
Aunque en España es más habitual nombrar el puesto, definirlo de manera breve y dar fechas, el responsable de las contrataciones de Google piensa que los porcentajes y las cifras de negocio impresionarán más a los futuros empleadores y darán una idea más aproximada de lo que eres capaz de hacer.