Hacer la misión, donde hay necesidad. Precisamente esta idea es la que ha llevado a la
ONG católica Misión Cebú a emprender proyectos humanitarios en Filipinas. La crisis del
coronavirus les ha inspirado a hacer la misión en un nuevo lugar, en esta ocasión en sus propios hogares y para los sanitarios y familais de
España.
Así un grupo de 10 jóvenes ha puesto en marcha la iniciativa
Material coronavirus, un proyecto de compra, fabricación y distribución de
material sanitario (mascarillas y viseras) que es donado a hospitales, centros de salud, residencias de ancianos y a cualquier colectivo que los necesite. Desde hace unas semanas también han emprendido una
campaña de donación de lotes de alimentos, dada la grave situación de emergencia social que viven miles de personas en España. El empuje y entusiasmo de estos chicos les ha llevado a recaudar por el momento 28.338,45 € y a contar con cientos de voluntarios, entre ellos los alumnos de la
Universidad Francisco de Vitoria (UFV)
Blanca Elízaga (estudiante de Psicología),
Ana Sánchez Tovar (Alumni UFV de Enfermería) y
Pablo García (estudiante de Periodismo y Relaciones Internacionales) que desde su estancia de Erasmus en Israel coordina la comunicación del proyecto y participa en esta entrevista.
P: ¿Cómo surgió la iniciativa Material coronavirus?
R: Surgió alrededor del 20 de marzo, cuando los jóvenes que formamos la ONG Misión Cebú nos dimos cuenta de que no podíamos quedarnos de brazos cruzados ante la situación que estaba viviendo el mundo y, en concreto, España. El
problema de desabastecimiento en los hospitales era realmente preocupante, y después de que un compañero de la ONG se comprara una
impresora 3D para fabricar viseras y otra se pusiera a hacer
mascarillas con máquina de coser, se nos encendió la bombilla: teníamos que hacer algo grande. Las personas con ganas de implicarnos formamos un equipo y nos distribuimos rápidamente las tareas. Empezamos por hacer una
página web para recibir donaciones y reclutar a voluntarios que supieran coser a máquina o que tuvieran impresoras 3D. Al mismo tiempo, investigamos acerca de materiales y procedimientos necesarios para hacer mascarillas quirúrgicas y viseras. Posteriormente, buscamos proveedores a los que comprar el material necesario y elaboramos una guías para enseñar a los voluntarios a realizar mascarillas y viseras. Por otro lado, un equipo se encargó de contactar con hospitales y residencias y hacer un listado de necesidades. Dos días después ya estábamos prácticamente en marcha, con el material comprado y llevándolo a los voluntarios.
P: ¿Contáis con el apoyo de alguna empresa o institución que done material para que podáis fabricar estos Epis?
R: Todo el material necesario para fabricar los Epis se compra gracias a las donaciones que tanta gente está haciendo a través de nuestra página web. Con este dinero compramos todo el material para la elaboración de las viseras y las mascarillas. Además, contamos con grandes proveedores que nos están facilitando la compra de material a gran escala, como son: SANFLEX (mercería al por mayor), Carrefour, Bricomart y MFV3D (tienda de 3D).
Para la fabricación de viseras disponemos de la colaboración de varias entidades de makers que colaboran con nosotros: Makers de la Sierra de Madrid, Sistemas del Hospital Puerta de Hierro, la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), la Asociación La Rueca y Tunchips, además de nuestros propios makers. Por último, hemos conseguido comprar casi 400 trajes de Epis procedentes de las Islas Filipinas. Gracias a la ayuda de varios filipinos y españoles ha sido posible realizar la compra y el envío con éxito.
P: ¿El material sanitario se distribuye sólo en Madrid?
R: Principalmente en Madrid, pero hemos recibido recientemente un pedido de Toledo. En la medida que podemos intentamos abastecer otras comunidades que lo requieren.
P: ¿Qué cantidad de Epis habéis conseguido fabricar hasta ahora?
R: Hasta ahora 44.304 mascarillas y 5.105 viseras. Los Epis recibidos de Filipinas están siendo distribuidos en función de los pedidos que recibimos de los 146 hospitales y residencias que atendemos. No tenemos un objetivo de producción marcado, la labor se ajusta a las necesidades de los hospitales, centros de salud y residencias de ancianos.
"No hace falta formar parte de un proyecto para ser parte del cambio que esta crisis del Covid-19 está impulsándonos"
P: Recientemente habéis ampliado el proyecto poniendo en marcha una campaña de donación de alimentos. ¿Cómo funcionan los carritos solidarios?
R: La ONG Misión Cebú colabora con Cáritas ayudando a la Red de apoyo Mutuo Bellas Vistas, cuya sede se encuentra en la Parroquia Nuestra Señora Del Encuentro. A través de Carrefour, las donaciones se destinan a abastecer de alimentos a cientos de personas necesitadas de los barrios de Bellas vistas, Berruguete y Cuatro Caminos. Hay cuatro opciones de donación: a través de lotes de alimentos básicos (de 10, 25 o 50 euros respectivamente) y también se puede donar una cantidad personalizada. Lo importante es ser conscientes de que todo suma y de que cada granito de arena que podamos aportar hará grande la montaña final. Nos basamos en la transparencia de las donaciones, actualizamos en la página web de manera semanal la situación actual y, también, los logros que se van consiguiendo.
P: ¿La crisis del coronavirus puede ser vista de alguna forma como una oportunidad?
R: Nosotros incentivamos a nuestros seguidores en redes sociales a que sean ellos mismos los que se planteen qué pueden hacer, cuál es su rol en esta crisis que afecta a todos por igual. Entendemos que esta crisis es un momento para que todos reordenemos nuestras prioridades y aunque no colaboren directamente con el proyecto Material coronavirus, que intenten hacerlo con su círculo cercano. No hace falta formar parte de un proyecto para ser parte del cambio que esta crisis del Covid-19 está impulsándonos a ver.